skip to main |
skip to sidebar
Un día como cualquiera, decidí no esperar la oportunidad si no yo misma ir a buscarla. Decidí ver cada problema como la oportunidad de encontrar una solución. Decidí ver cada noche como un misterio a resolver, decidí ver cada día como una oportunidad de ser feliz. Aquel día descubrí que mi único rival eran mis propias debilidades, y que en eso está la única mejor forma de superarlos. Aquel día, dejé de tenerle miedo a “perder”. Me dejó de importar quién ganara o perdiera, ahora me importaba sentirme mejor que ayer, aprendí que lo difícil no es llegar a la cima si no jamás dejar de subir. Descubrí que el amor es más que un simple estado de enamoramiento, el amor es una filosofía de vida. Comencé a construir mi propio túnel con luz de este presente. Aquel día decidí que los sueños son para hacerse realidad. Desde aquel día ya no duermo para descansar, ahora simplemente duermo para soñar.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Camila